Diario de sueños 2

     En ésta ocasión tuve un sueño muy tierno. Me encontraba en un manantial, el agua que brotaba había formado un lago en su centro habían 4 islas como de dos metros cuadrados, y el manantial se encontraba encerrado por altas paredes de tierra de las cuales crecía mucha vegetación, sólo había una entrada por una grieta en una de las paredes. En general era un lugar muy fresco y verde.

Entonces, en ese lugar yo tenía un perrito llamado Huevo, un labrador pero muy pequeño ya que cabía en mis manos, me encontraba sentado jugando con él cuando, de pronto, un patito nació de su huevo, lo llame Pato. Ahora tenía dos mascotas bebes y yo seguía jugando con ambos sentado en mi isla. Huevo se encontraba en mi pierna derecha y Pato en la izquierda, Huevo quería jugar con Pato pero Pato quería otra cosa, él quería entrar al agua y comenzar a nadar, entonces se bajó de mi pierna y corrió al agua y comenzó a nadar y sumergirse y hacer cosas de patos. Huevo sólo lo veía desde mi pierna pero como quería jugar con él corrió y de un saltó entró al agua, pero no sabía nadar, entonces lo tome con las dos manos y lo saqué de ese estanque, pero Huevo aún quería jugar con Pato, Huevo se sentó a la orilla de la isla y comenzó a ladrarle a Pato y Pato nadó desde el lugar donde se encontraba y se se acercó a la orilla para estar con Huevo.

De pronto, unos niños canibales comenzaron a caer de las paredes redeandome, rápidamente tomé a Huevo y Pato, uno en cada mano, y corrí a la grieta en la pared, así salí a una playa de arena blanca y agua azul claro, logrando escapar del peligro de los salvajes carnivoros que me comerían y tomarían de postre a Huevo y Pato.